Gerald Green y su trauma infantil por un dedo mutilado.

Gerald Green ha contado cómo superó la pérdida de un dedo de su mano derecha, accidente que le causó un trauma en su momento. Sucedió cuando el jugador de Phoenix Suns estaba en sexto curso. Trató de hacer un mate en una canasta casera, con tan mala suerte que el anillo que llevaba en el dedo anular se enganchó en un clavo y se lo desgarró. Los médicos le dijeron que la única opción era amputarlo.


“Nunca me he acostumbrado a hablar sobre ello”, cuenta Green, de 29 años. “Hace cinco o seis años no habría sido capaz de contar esto. Creo que lo más duro vino después, el miedo a las burlas, la vergüenza, estar siempre con la mano escondida en el bolsillo…”. Así, cuando el jugador fue drafteado (número #18 por Boston Celtics en 2005) y salió a saludar al comisionado (entonces David Stern) como es preceptivo, llevaba la mano derecha hundida en la chaqueta. Stern le pidió que por favor la sacara. “Siempre he sido un poco tímido al respecto, pero creo que mejora a medida que me hago mayor. Simplemente quiero servir de inspiración a la gente con ello”.